Un ángel en el locutorio
Estos días vine siempre al mismo locutorio, y no hay duda que la chica que atiende está postulándose para el Premio Nobel de la Paz. Hace 10 minutos que estoy sentado acá y esto fue todo lo que pasó.
Llegó una señora muy mayor y pidió cabina. Enseguida empezó a gritar que “da ocupado y mi hija se desespera si no la llamo”. Llamaba a celular y la chica le explicó que tenía que agregar un 9, y dónde, mientras lidiaba con uno que le pidió fotocopias, que amplíe, que apaisado, que no se ve el código de barras, que me lo puedo llevar en pendrive. La señora insistía con su hija desesperada, hasta que vino a la cabina y le marcó el número. (more…)